Vacaciones en el Nuevo Paraiso Mexicano

Puerto Peñasco es un paraíso recién descubierto al turismo, ubicado en la parte noroeste del Estado de Sonora, colinda al norte con los Estados Unidos y al sur es el Golfo de California, se ha consolidado como uno de los puntos de mayor atractivo turístico en el estado, debido a las bondades de su clima cálido, sus bellezas naturales y el atractivo despliegue de actividades que pueden realizarse por toda su bahía.

altLa vista no te alcanza para distinguir dónde las interminables zonas de arena se funden con el azul intenso del maravilloso Mar de Cortés que albergan la más diversa vida submarina, el espectacular ciclo de mareas es diferente al de cualquier otro del país, con aguas que se alejan hasta medio kilómetro, Puerto Peñasco es el lugar ideal para disfrutar de un ambiente hospitalario y cálido.

El Desierto Sonorense crea paisajes sólo posibles en este destino, con dunas donde la acción nunca termina porque las motos, vehículos todo terreno y buggies para arena, aumentan las actividades de aventura durante todo el año. La región invita a cómodos recorridos, a la pesca deportiva, la aventura como la visita a Isla San Jorge o Isla de las Aves, casi 50 kilómetros al sur. También es posible vivir la historia natural del Estero Morúa; pasear por la bahía y disfrutar bellos atardeceres desde un yate; observar el salto de los delfines o el paso diario de las ballenas durante el invierno. Todo favorecido por agradables temperaturas de 35°C en verano y 18° C en invierno.

Ecoaventura

También es un sitio donde encontramos infinidad de criaturas marinas, desde raros invertebrados hasta juguetones lobos marinos, es excepcional por las riquezas naturales que la rodean quien esté dispuesto a ir en su búsqueda, le recomendamos recurrir al Centro Intercultural de Estudios de Desiertos y Océanos (CEDO) http://www.cedointercultural.org/, Organización dedicada a la investigación y conservación del alto Mar de Cortés y el Desierto Sonorense, realiza una amplia labor educativa y de promoción de la conservación que incluye “ecoaventuras” visitas guiadas a distintos rumbos naturales de la zona. Las hay por las grandiosas dunas, volcanes y sahuarales de la cercana Reserva de la Biosfera del Pinacate y Gran Desierto de Altar. Sin embargo, las más novedosas son las visitas de orientación acuática.

Pesca deportiva

Marinas perfectamente equipadas esperan a los fanáticos de este deporte, que cuenta con un extraordinario potencial en este orden y donde el turista tienen todos los servicios a su alcance.

La pesca deportiva, se efectúan todo el año, debido al benigno ambiente marino, donde las especies más comunes son: pargo, baqueta, sierra, cochito y cabrilla.

Los más audaces pueden practicar buceo en las transparentes aguas cercanas a la Isla San Jorge, donde es posible experimentar contacto con lobos marinos, delfines y hasta con la vaquita marina, un mamífero endémico de estas aguas y en peligro de extinción.

El Pinacate

No lejos de Puerto Peñasco, en el complejo desértico conocido como Desierto de Sonora, se encentra el Pinacate a pesar de ser una de las regiones más áridas de México, y uno de los lugares más calurosos de América del Norte, Es caracterizada por su inusitada belleza escénica y gran diversidad biológica marcada por actividad volcánica, lo cual la transforma en un laboratorio de geología a cielo abierto, atrayendo la atención de turistas e investigadores provenientes de diversas regiones del mundo.

Por su riqueza ecológica, el valor paisajístico de sus impresionantes volcanes y valiosa historia, el Pinacate fue declarado por decreto presidencial reserva de la biosfera en 1993, y en 2007 fue elegido como una de las 13 maravillas naturales del país.

Ofrece excelentes oportunidades para realizar actividades de aventura y observación de la naturalez, al escalarlo se obtiene una vista privilegiada del cercano Golfo de California o Mar de Cortés, además de observar la combinación volcánica y desértica del lugar. Visitar el Pinacate es encontrarnos con milenarios acontecimientos grabados en las obscuras rocas.

Recomendaciones: Es muy importante dar aviso de tu presencia a las autoridades de la reserva para recibir auxilio en caso de alguna contingencia o accidente. La mejor época para ir a la reserva comprende los meses de otoño e invierno (de octubre a marzo), cuando hace menos calor. En primavera y verano las temperaturas son muy elevadas y se está expuesto a la deshidratación. Llevar mucha agua (calcular de dos a tres litros diarios por persona), pues no hay fuentes naturales de abastecimiento.

Hay zonas de campamento y caminos bien establecidas para evitar el impacto humano descontrolado en la Región. En el Cono Rojo se puede acampar para subir a los picos Carnegie y Pinacate.