Al empezar con un nuevo trabajo o una nueva posición, es natural el primer día sentirse nerviosa, pero es importante no dejar que tus nervios afecten tu autoestima. Si tu preocupación es que no eres lo suficientemente buena para el cargo o que no les gustaras a tus nuevos colegas etc. Iniciaras a comportarte como si así fuera, y perjudicaras tus oportunidades de triunfar. Pero puedes neutralizar esos pensamientos negativos.

Causar una mala primera impresión. quieres mostrar tus valores sin que te tachen de engreída. Piensa en alguna amiga o antigua colega que respetes y admires, y en la última vez que tuviste una conversación con ella. Anota lo que más te impresiono del modo que ella se comporto. (Sería el tono de voz, la atención que puso en lo que decías o el contacto visual), imita su conducta en tu nuevo trabajo, y tus interlocutores se impresionaran contigo, tal como a ti te pasó con ella.

Que no te consideren lo suficientemente buena. debes concentrarte en el hecho principal, te han dado el trabajo, por lo tanto tus nuevos jefes piensan que puedes desempeñarlo con efectividad, no te convenzas a ti misma de que no puedes hacerlo. En vez de dejarte llevar por el pánico cuando te den el primer gran proyecto, empieza a pensar en la información que necesitas para concluirlo con éxito.

Hacer que los colegas te acepten. no puedes hacer que los demás te quieran, pero si actuar de manera que te acepten, imagina que tipo de relación quisieras tener con tus colegas. Apoya sus ideas, recuerda las cosas importantes de sus vidas y nadie tendrá motivo para quejarse.

Tu nuevo lugar esta lleno de cosas de tu antecesor. No te asustes, lo más probable es que tu nuevo jefe haya estado ocupado como para resolver estas cuestiones, y no es una señal de que no te quieren ahí. No te preocupes y usa eso para mostrar lo que vales. Averigua a quien llamar para deshacerte de las cosas innecesarias, pon tu computadora a funcionar. No es el momento de quejarte, demuestra que eres capaz de manejar cualquier situación.