Para profundizar sobre la habríaqueitis y sus síntomas, primero hay que definir con qué tipo de persona te identificas pues dependiendo de cómo somos es que reaccionamos ante las situaciones. Se dice que las personas nos caracterizamos por ser mente, corazón y cuerpo y aunque todos tenemos las 3 características, siempre hay una que domina.

Por un lado, están las personas cuerpo que son pura acción, apenas si planifican y sus palabras preferidas son acción o ejecución; éstas son las personas que siempre tienden a actuar. Hay un segundo tipo denominado personas mente que son más reflexivas, analizan todo y valoran cualquier escenario antes de actuar; son personas más racionales y su respuesta ante las situaciones siempre es de analizar y racionalizar todo. El tercer tipo son las personas corazón que son aquellas cuyas emociones son las que las rigen; estas personas suelen tener ansiedad, llorar, estrenarse y su forma de actuar siempre es totalmente emocional.

Ahora bien, a todas las personas se nos presentan situaciones de incertidumbre que pueden provocar la aparición de la habríaqueitis y es que no hay nada más acertado para definir el comportamiento característico que se produce en muchas personas en diferentes facetas de la vida que la habríaqueitis, que consiste en solo planificar cosas pero nunca llevarlas a la acción. Las personas que más fácil caen en este ciclo improductivo son las personas de tipo mente.

Por ejemplo, cuando alguien busca trabajo entra en un ciclo de reflexión y conclusiones de “habría que mejorar mi curriculum”, “habría que hacer una lista de contactos”, “habría que revisar portales de empleo”, “habría que investigar sobre ferias de empleo”, etc. Esa planificación, de poner sobre la mesa lo que habría que hacer es necesaria, pero cuando la persona pasa el tiempo pensando en que habría que hacer sin ordenar sus ideas, priorizarlas y convertirlas en tareas que lleve a la acción, no sirve de nada la reflexión constante pues se enfocan a decir todo lo que habría que hacer, pero no hace nada, por lo tanto, se vuelve improductivo.

Como tu CÓMplice constructora de marcas, te digo que esta habríaqueitis lejos de posicionarte como una persona analítica y reflexiva te hace ver como una persona improductiva. Así que hay que parar las antenas sobre la habríaqueitis que todos tenemos y ser reflexivos para planificar y saber qué se debe hacer, pero es necesario llevarlo a la acción y fijar tareas, objetivos y plazos para posicionarnos como personas proactivas.

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Joss Espinosa @JossEspinosa constructora de marcas 24×7 en @COMplicesCOM nativa digital con 10 años de experiencia en las áreas de editorial, relaciones públicas, imagen personal, social media y planeación estratégica.